Dueños de fincas del paraje de Corvales defienden que el camino es público

Los vecinos no comprenden las críticas de la coalición al Ayuntamiento por no conceder una licencia al propietario del cortijo "que quiere colocar una cancela para cortar el paso por el camino del Arco que atraviesa el paraje de Corvales". Los dueños de las fincas colindantes con el Cortijo aseguran que el camino de Corvales no es privado, sino una vereda por donde puede transitar cualquier persona. Dicen tener reconocido legalmente y ante los Tribunales de Justicia el derecho a pasar por el camino para acceder a sus fincas al ser "el único acceso natural para esas tierras y por donde se ha accedido toda la vida". 

Mantienen que, según sentencia del Juzgado de Primera Instancia Nº 6 de Granada, ante la demanda interpuesta por el propietario del cortijo defendiendo que los dueños de las fincas colindantes no tenían derecho a pasar por el camino, el juez falló desestimando tal pretensión argumentando literalmente: "que el camino que en parte atraviesa la finca del actor es presumiblemente público, la demanda no puede estimarse pues los demandados no transitan por el camino que conduce al Arco en virtud de servidumbre de paso alguna entre particulares, sino por la naturaleza de vía pública que corresponde al camino por el que puede transitar cualquier ciudadano, con expresa condena en costas al actor".

Afirman que hay documentos y escritos oficiales, algunos de 1721 y 1867 que prueban que el camino de Corvales es patrimonio común del pueblo y que el agua del nacimiento de Corvales, cuya cañería "transita por debajo del camino y abastecía antaño a La Zubia, ha bautizado a varias generaciones de zubienses". Argumentan que no es la primera vez que el propietario del cortijo intenta cortar el paso, colocando obstáculos e impidiendo el acceso a las demás fincas para realizar los trabajos de labranza, arado y recolección, la mayoría con plantaciones de olivares y almendros. Y señalan que, según la sentencia del Juzgado de Primera Instancia Nº 2 de Granada, el juez requirió al dueño del Cortijo "para que se abstenga en lo sucesivo de cualquier acto de despojo, debiendo dejar expedita la vía para el tránsito en la misma forma en que se venía haciendo". Dicen que el Ayuntamiento tiene pleno conocimiento y documentación suficiente sobre las sentencias judiciales dictadas durante el litigio mantenido entre los propietarios de las fincas colindantes y el dueño del cortijo, debiendo de actuar en defensa del patrimonio del pueblo y de los intereses legítimos de sus ciudadanos. Los vecinos critican a IU por tomar una postura "sesgada y parcial" apoyando a una persona que, con su pretensión de cortar el camino, está "infringiendo la ley y perjudicando gravemente a un colectivo de ciudadanos y al patrimonio público del pueblo". Creen por eso que IU ha politizado el asunto, con decisiones y argumentos que en nada benefician al pueblo, "ignorando que la razón fundamental del problema es la tozudez de una persona que, utilizando sus influencias, quiere cortar el paso del camino de Corvales". Sostienen finalmente que la opinión pública tiene que saber que el camino de Corvales no es de propiedad privada y que por tanto el dueño del cortijo no tiene derecho alguno para colocar una cancela que obstruya el paso libre de cualquier ciudadano.