Lorenzo Casado publica su primer poemario

Confiesa que el poeta zubiense Luis Melgarejo y las actividades que se llevan a cabo en La Casa con Libros le han introducido en el mundo de la poesía. Sumergirse en la biblioteca de La Casa con Libros, con más de 7000 volúmenes, le ha posibilitado encontrar su mejor inspiración. Sus referentes son el verso libre y la poesía de la experiencia, como el escritor de origen inglés, Roger Wolfe.

Nacido en 1974 y comercial en un laboratorio farmacéutico, siempre ha estado inmerso en el mundo del arte. Se ha encargado de escribir las letras de las canciones de los grupos en los que ha estado. Siempre se ha dedicado a la música y confiesa que en la poesía ha encontrado un hueco para expresarse, una forma de comunicarse, en la que le gusta el mensaje directo de los poemas «más económicos, porque utilizando cuatro palabras se puede hacer un verso; de forma que se gastan más palabras en explicarlo», admite. «Se dice mucho en muy pocas palabras».

Toca la batería en el grupo. Oceans Six, donde hace un show de homenaje a los crooners, desde Frank Sinatra a Tony Bennet, pasando por Dean Martin. Un estilo que retrotrae a la época dorada del Hollywood de los años 50 y 60, de aquí que acompañen cada canción contando pequeñas historias sobre su gestación, o la película en que aparecían.

En Mil Demonios tocaba la guitarra. Era un grupo de pop rock y rhythm and blues de La Zubia. En el resto de los grupos en los que ha estado se dedicaba a escribir los temas y a la composición. En Zero Positivo también tocaba la batería; y en Kostoriko, cantaba. Ha escrito relatos cortos en La Encina Muerta, una revista de actualidad, de temas culturales, deportivos y de recetas, que fue la continuación de la revista La Encina del Club Blat de la localidad.

En La Casa con Libros realizó una lectura de sus poemas el pasado 18 de marzo, en el recital de poesía organizado por este alojamiento rural, donde se celebran actividades culturales, que atraen a artistas de todo el mundos.

Escribe en el ordenador y sus amigos y la lectura son su fuente de inspiración. De las sugerencias de sus amistades aprende. «Me gusta que opinen, me corrijan y me critiquen», porque le ayudan a modificar y a buscar soluciones para algún poema en el que trabaja.