Los expertos recomiendan formación, prevención y concienciación en el ámbito de la seguridad

Carlos Aranguez, profesor titular del departamento de Derecho Penal de la Universidad de Granada y abogado en ejercicio, habló sobre política criminal en materia de seguridad vial y analizó cómo en España las muertes y siniestros vinculados a accidentes han descendido, teniendo una de las mejores tasas de Europa. Ello ha sido posible, según destacó, gracias a una serie de políticas de la Dirección General de Tráfico (DGT), como el programa de ayudas Plan PIVE y el férreo control de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) que incentiva a los propietarios a sustituir sus vehículos, la mejora de la red de carreteras y, sobre todo, por las políticas de concienciación llevadas a cabo sobre la peligrosidad de conducir con una actitud temeraria o bajo los efectos del alcohol y otras drogas.

Carlos Aranguez subrayó cómo España es pionera en introducir delitos como la velocidad excesiva o carecer de licencia, y cómo se está creando una nueva cultura sobre la conducción vial que está llevando a los ciudadanos a ser más conscientes de su propia vida y de la de los demás, más conscientes de lo importante que es moderar la velocidad en la carretera y de lo peligroso que es conducir bajo los efectos de las drogas.

Aranguez agradeció que en nuestro país la tendencia haya cambiado, que se haya pasado de apostar por una función represiva, sancionar, a apostar por campañas de concienciación para hacer a los conductores más responsables, lo que ha repercutido en un descenso de las tasas de accidentes.

Por su parte, José Antonio Moreno, superintendente jefe de la Policía Local de Granada, basó su participación en las I Jornadas de Seguridad de La Zubia en hablar sobre las grandes concentraciones, venta y consumo de alcohol en la vía pública. José Antonio Moreno comenzó su intervención haciendo una evolución jurídica del botellón desde que éste apareciera, según resaltó, en el año 1984 en Madrid como modo alternativo de ocio de los jóvenes, movidos por un factor fundamentalmente económico ante los elevados costes del precio del alcohol. Seguidamente, hizo un análisis del tratamiento jurídico dado por todas las administraciones en general (del Estado, autonómicas y locales). Y resaltó los bienes jurídicos de protección que resumió fundamentalmente en tres: los residuos sólidos urbanos, la contaminación acústica y alteración de la pacífica convivencia.

Ante esta problemática, según José Antonio Moreno, el gran reto policial está en basar su actuación, más que en actuaciones coercitivas, en la la instauración de un modelo de policía comunitaria, en elaborar políticas alternativas de información y formación a los jóvenes en los centros de enseñanza, como pueden ser institutos o universidades. Las labores policiales deben ser equilibradas, con rigor y flexibilidad desde la imaginación y la presencia más efectiva en la vía pública, resaltó.

Este viernes, día del Ángel Custodio, hubo acto conmemorativo del patrón de la Policía Local, en el Centro Cultural Carlos Cano.